lunes, 17 de mayo de 2010

La extraña aventura de Águeda Ivanova - Resumen

Águeda es una joven maga que vive con su gato en la casa heredada por su madre.
Un día, sin previo aviso el buzón del cuadro que colgaba en el recibidor de su casa empezó a hablar; le entregó un mensaje de parte de la Organización Mágica de Control de Poderes Sobrenaturales (OMCPS) en el que la avisaban de una visita en los días posteriores a la entrega.
Asombrada por el extraño suceso de que su cuadro favorito le hablara, Águeda llamó a su único amigo, Heracles, quién se quedo tan anodadado como ella.

La OMCPS era la sede terrestre del Gobierno de todas las criaturas que poseían poder mágico en el planeta y la formaban los miembros más ancianos de las especies mágicas más poderosas: Jack, el duende más anciano, era poseedor de la Varita y la Escoba de la Riqueza; Vigilio, el ángel más anciano, poseía la Varita y la Escoba de la Sabiduría; Yedra, el hada más anciana, era dueña de la Varita y la Escoba del Amor; Jo, el más anciano de los gnomos, era poseedor de la Varita y la Escoba de la Bondad; y por último, Salvia, la más anciana de los elfos, poseía la Varita y la Escoba del Poder.
En una de las muchas reuniones que todos los miembros tenían, hablaron del extraño y fuerte poder mágico que Águeda tenía, y decidieron que debían hacerle una visita y hablarle acerca de la magia y del Reglamento que tenía antes de que le ocurriera lo que le ocurrió a Sergey Ivanov, el padre de Águeda, cuando intentaron ponerle límites a su magia.

La visita que le hizo Salvia a nuestra protagonista sembró en ella dudas e interés de su procedencia y cuando la elfa del Poder se marchó tras contarle todo lo sucedido con su padre ella decidió buscar aquella carta que su madre le había dejado.
Estando leyéndola apareció un diablillo del desierto, Dim (encontrado por un antiguo miembro de la OMCPS y ahora bajo la tutela de la elfa del Poder), asignado por Salvia para vigilar e intentar ayudar a Águeda sobre todas las dudas que tuviera acerca del Reglamento de la Magia y de su procedencia.
Águeda aprovechó la ocasión y decidió viajar a la Siberia, lugar de procedencia de su padre, acompañada de Heracles y de su nuevo amigo Dim para averiguar qué había pasado realmente con su padre.

Mientras, en una oscura y vieja casa por fuera, pero lujosa por dentro, Akram, ex-miembro de la OMCPS, urdía un plan para volver a ser el más poderoso de las criaturas mágicas.
Contaba en su plan con un prisionero, un pequeño ser del que todavía no sabemos nada, y con la ayuda de su mayordomo, Equis, un bosgo del bosque que servía fielmente a Akram.

Durante el viaje a la pequeña aldea donde se crió Sergey, Águeda conoció a Ekaterina, la bruja del pueblo y una de las mejores amigas que tuvo su padre antes de desaparecer.
Ekaterina, les contó a Águeda y sus amigos lo que ella había visto en su bola el día en que Sergey desapareció. Les dijo que había gente esperándolo en su cabaña, en el bosque, que le dijeron algo que ella no pudo escuchar y que entonces Sergey salió hacia su lugar favorito, un calvero en el bosque dónde el decía que nació, y que allí desapareció.

En la OMCPS estaban preocupados. No habían tenido noticias del ser que habían enviado para vigilar a Águeda, y no sabían porqué. Mientras debatían sobre si debía ir ellos mismos para ver qué sucedía empezó a salir la extraña oscuridad de la estancia suprimida, hecho que parecía mucho más importante que el extraño silencio que guardaba el diablillo que habían enviado a casa de Águeda.

De vuelta a casa, con desilusión y tristeza por no haber averiguado gran cosa, Águeda decidió que era hora de atar cabos y, tras consultarlo con su amigo Heracles, decidió llamar a Dim:
-Me gustaría saber algo. ¿Quiénes estaban en la cabaña cuando desapareció mi padre?

sábado, 15 de mayo de 2010

De vuelta

Sí, lo sé.
5 meses.
Casi medio año.
Llevo más de 2 intentando seguir con la historia.
No tengo remedio.
Primero pensé en seguir con la historia dónde la dejé... ¡Qué pena me dio cuando me di cuenta que ni siquiera sabía dónde se quedó Águeda!
Sí, que sí, que no conseguía recordar como había quedado la historia, así que tuve que pensar en algún modo de continuar.
Un resumen.
Hacer una entrada recopilatoria de cómo estaban las cosas antes de mi repentina desaparición a causa de la apatía y de la pereza que me invaden.
Llevo más de 2 meses intentando sacar un ratillo para poder leerme toda la historia y hacer un resumen de ella...
Y hoy por fin he decidido cuándo voy a publicarlo.
Sí, ya sé que no soy digna de confianza. He dejado abandonado mi blog 5 largos meses y también he dejado abandonado vuestros blogs. Y por ello me siento peor aún.
Pero no es que los haya abandonado del todo... He leído todas las entradas que habéis hecho, pero la pereza no me dejaba comentaros.
Pero eso va a acabar.
Por eso esta entrada. Ya me he puesto fecha. Y si os la digo tengo que cumplirla, porque ya me he portado demasiado mal con vosotros como para encima engañaros.
Así que está decidido.
El lunes habrá entrada resumen de La extraña aventura de Águeda Ivanova y a lo largo de la semana podréis disfrutar (si es que todavía estáis interesados en la historia) del siguiente capítulo, que para seros sincera, no sé qué número es.
Pero una cosa no se me ha olvidado. El premio. Sí, ese de que el ganador de un futuro (espero que no muy lejano) concurso podría elegir la temática del próximo relato.
Pero... ¡qué digo! ¿Todavía estáis interesados en esto? No me lo merezco... No merezco que comentéis siquiera...
Aunque... la esperanza es lo último que se pierde, ¿no?