miércoles, 29 de julio de 2009

La extraña aventura de Águeda Ivanova - La historia de Dim - Capítulo 11

En un abrir y cerrar de ojos estaban los tres rodeados de muchos árboles. No se divisaba población alguna en ninguna dirección y estaban empezando a notar las bajas temperaturas.
- Bueno Águeda, ya hemos llegado - Dim parecía ser inmune al frío que allí hacía.
- S-s-será me-m-mejor que ca-m-m-mi-minemos hacia al-g-g-gún l-l-la-lado, ¿no? - Heracles estaba tiritando.
- Sí, deberíamos dirigirnos hacia donde esté la población más cercana - dijo Águeda tendiéndole un polar a su amigo.- Dim, ¿sabes en qué dirección podemos ir?
- Sí, seguidme.

Caminando entre hierbajos y matorrales, Águeda y Heracles seguían al pequeño diablillo en silencio.
- Y bueno Dim, ¿cómo llegaste a ser colaborador de la OMCPS? - Águeda sentía mucha curiosidad por ese pequeño ser que cuidaba de ella como si fuera su ángel de la guarda.- Y si eres un diablillo del desierto, ¿no tendrías que vivir allí?
- Bueno... es una larga historia - Dim parecía triste.
- Cuéntanosla, así amenizarás la caminata.
- Sí, y además podremos averiguar cosas sobre ti - Heracles, seguía sin fiarse de él.
- Está bien... - el pequeño acompañante cedió sin muchas ganas -. Yo nací en el Gran Desierto, al sur, y por alguna extraña razón nací morado. Normalmente los diablillos del desierto son rojos, algunos más claros, otros más oscuros, pero no se salen de la tonalidad. Pero yo nací morado, no sé porqué.
>> Para mis padres siempre fui como su mascota; no podían considerarme hijo suyo y no me dejaban salir de casa. Un día me escapé, quería ver a otros como yo y lo único que encontré fue rechazo y asco. Mis padres no volvieron a hablarme, y me echaron de casa. Me recogió el orfanato del pueblo y me encerraron en una celda hasta que empecé a ir al colegio.
>> Todos mis compañeros me odiaban, ninguno me dirigía la palabra y me pegaban cada vez que tenían oportunidad. Hasta intentaron arrancarme los cuernos, pero lo único que hicieron fue partírmelos.
>> Pero eso acabó pronto; estando yo escondiéndome de mis compañeros de clase un día, apareció un hombre que me recogió. Se llamaba Akram. Era miembro de la OMCPS y al ver que en mi comunidad todos me rechazaban me llevó con él y empecé a trabajar de ayudante para la organización.
>> Akram era bueno, al principio. Luego empezó a tener diferencias importantes con los otros miembros de la OMCPS; quería ser más permisivo con la magia, suavizar las leyes estrictas ya existentes. Llegó hasta tal punto esa diferencia que lo echaron de la organización.
>> Cuando lo echaron, pensé que yo me tendría que ir con él, pero Salvia me recogió bajo su tutela y he estado trabajando para ella desde entonces. Cada día que pasa me alegro de que alguien pusiera a esa adorable elfa en mi camino.

- ¡Vaya! Has tenido que sufrir mucho - Águeda se agachó y acarició con ternura a su nuevo amigo.- Pero no te preocupes, ahora estás con gente que va a cuidar de ti siempre.
- Bueno, deja los mimos para otra ocasión - Heracles no se creía ni una sola palabra de lo que había contado el pequeño Dim - se ve una pequeña aldea. Será mejor que nos demos prisa, antes de que nos congelemos.

Continuará...

viernes, 24 de julio de 2009

Enlace a mi otra parte

Es la primera vez que lo hago pero no será la última.
Algunos ya os habréis dado cuenta de que tengo otro blog, y bueno, he pensado que las entradas que haga en este blog o en el otro y que me parezcan importantes tendrán un pequeño enlace en el contrario (no sé si se me ha entendido...).
Así que os voy a dejar un enlace a mi otro blog. Es la primera vez que lo hago, y por ello quizá sea la más importante.
Quiero unir los dos blogs, que todos sepáis que mis dos yos dividivas forman una sola...
Pinchad aquí si queréis descubrirme por entero.

jueves, 23 de julio de 2009

La extraña aventura de Águeda Ivanova - El viaje - Capítulo 10

- Acércame ese forro polar; debe de hacer frío por allí, ¿no? - Águeda se movía por la habitación como si se fuera seis meses de casa a pasar la mayor aventura de su vida.
- Pero, ¡quieres estarte quieta en un sitio y explicarme eso de que "nos vamos" a la Siberia! - Heracles no sabía si sentirse furioso con la persona que había decidido que él también pasaría frío o si empezar a hacer él también la maleta.
- Vamos a ver, es todo muy sencillo. Nos vamos a Rusia porque quiero averiguar quien fue mi padre.
>> Salvia habló de él como si hubiera sido un hombre espantoso que prefirió la autodestrucción a vivir dosificando la magia, y algo dentro de mí me dice que eso no es del todo cierto. Así que la mejor forma de averiguarlo es ir allí y preguntar por él.
>> Estoy segura de que Dim sabe dónde vivió y si, realmente usaba la magia como Salvia dijo que la usaba, no creo que pasara muy desapercibido entre los lugareños, ¿no crees?
- ¡Ahhh! Entonces, todo aclarado... Sólo una preguntita sin importancia, ¿quién es Dim? - Heracles cada vez comprendía menos todo lo que pasaba alrededor de su amiga.
- Dim, digamos que es como un "canguro" que me ha puesto la organización para que me ayude en todo lo que necesite. Al principio puede asustarte, pero es muy simpático y bueno.
- ¿Cómo que asustarme?
- Si, verás, es que no es muy agradable a la vista, es un diablilllo del desierto de color morado, y tiene los cuernos como cortados, y una cara muy arrugada con unos colmillos verdes que le salen de las comisuras de los labios... pero una vez que hablas con él, es muy agradable.
- ¿Y él sabe que también viene a la Siberia? ¿O has decidido decírselo cuando a él le parezca presentarse por aquí?
- No seas así... Él todavía no sabe que nos vamos, pero no creo que ponga pegas porque lo han mandado para ayudarme, ¿no? Y además, aparecerá nada más que yo diga la palabra mágica - Águeda sonrió con una sonrisa picarona a su amigo y miró a la ventana .- Efímero.

- Águeda, te dije que le hablaras a tu amigo de mí antes de que el me viera... - el pequeño Dim estaba sentado encima de la maleta mirando como Águeda intentaba hacer entrar a Heracles en la habitación.
- ¿Estás segura de que ese bicho no hace nada? Te lo digo, porque tiene toda la pinta de ser el malo malísimo de una peli o algo así.
- Tranquilo, siéntate en la butaca y quédate quietecito, que le voy a contar a Dim qué es lo que vamos a hacer hoy - Dim miraba a Águeda con toda la atención del mundo.

- Bueno - Dim se puso en pie.- Cogeros de las manos, nos vamos a Siberia.

Continuará...

lunes, 20 de julio de 2009

La extraña aventura de Águeda Ivanova - Aparece Akram - Capítulo 9

En lo alto de una montaña desértica se situaba la vieja y oscura morada del viejo Akram. Era una casa medio en ruinas, con paredes de frías piedras y llenas de musgo. Tenía a la entrada una casucha de madera dónde habiataba el anciano bosgo doméstico que guardaba el lugar. Una alta y oxidada verja delimitaba los territorios de la hacienda y todo el terreno estaba sumergido en una penumbra terrorífica.

Dentro de la ruinosa casa todo parecía diferente. Había una entrada lujosa e iluminada con dos grandes lámparas llenas de pequeñas bombillas; se veía ascender una amplia escalera de madera cubierta por una gran alfombra verde botella y barandas doradas.
Desde esta entrada se pasaba al gran comedor, con una gran mesa de ébano y sillas a su alrededor; y a la sala de estar, en la que ardía un gran fuego en una enorme chimenea que ocupaba la estancia de pared a pared.
Frente al fuego había un enorme sillón, a su lado una pequeña jaula se situaba encima de la mesita auxiliar. Dentro había algo que se movía inquieto; tenía su pequeña boca amordazada y un ojo saltado.

- No deberías moverte tanto - una grave voz salió del gran sillón.- Aunque te muevas, no lograrás salir y lo único que conseguirás es cansarte.- El viejo Akram sujetaba con sus dedos una fina vara de cerezo y apuntaba con ella a la atemorizada criatura.
>> Sabes que ya no puedes hacer nada, y ahora lo único que puedes hacer es ver cómo el gran Akram vuelve al mundo mucho más poderoso que antes...

Akram se había quedado mirando el fuego fijamente; en las llamas se veía el reflejo de la joven Águeda tomando una deliciosa taza de té con su nuevo amigo.

Continuará...

miércoles, 15 de julio de 2009

La extraña acentura de Águeda Ivanova - Una criatura mágica - Capítulo 8

- Perdona, no quería ser grosero, pero el viaje ha sido espantoso, un tráfico horroroso, un niño que no dejaba de jugar con una de esas endiabladas trompetitas de plástico, dos mujeres discutiendo por el asiento de la ventana... En fin, un caos; imagino que ya sabrás como es el tranporte público.- Aquél "bicho" sonrió a modo de disculpa y observó con mirada de cordero degollado la reacción de la sorprendida.
- Pero, vamos a ver, ¿tú qué y quién eres ahora? Y no me digas que eres otro miembro de la organización esa que me está arruinando todas las ideas que tenía metidas en la cabeza - Águeda empezaba a estar un poco harta de seres raros, cuadros que hablan e historias de autodestrucción.
- Te entiendo, yo en tu lugar me sentiría de la misma manera - ese ser morado mostraba verdadera compasión.- Pero para eso estoy yo aquí; no soy miembro de la OMCPS, pero colaboro con ella estrechamente y he venido aquí para ayudarte a asimilar toda esta nueva información sobre tu vida, para orientarte en las decisiones que tendrás que ir tomando y, por supuesto, para responder todas las dudas que tenga.
>>Me llamo Dim, y soy el primer diablillo del desierto que ha conseguido colaborar con la organización. Esta no es mi primera misión, pero sí que es la más importante. Estoy deseando empezar a trabajar contigo.
>>Como supondrás, no me voy a separar de ti; estaré a tu disposición día y noche, y todo el tiempo que necesites para tomar las decisiones correctas y adecuadas. Pero claro, no puedo estar aquí mucho tiempo, las personas no-mágicas se asustarían de mí mucho más de lo que me asusto yo de ellas; si me necesitas, sólo tienes que decir una palabra, la que tu elijas, pero siempre tiene que ser la misma, y en cuanto la pronuncies me apareceré en el lugar en el que estés. Lo has entendido, ¿verdad?
- Sí, te he entendido. Pero hay algo que no me cuadra - Águeda no comprendía una cosa - si te manda la OMCPS, ¿por qué Salvia no me dijo que vendrías?
- Jejeje, eres muy avispada, ¿eh? Me gustan las personas inteligentes - Dim parecía sentirse realmente orgulloso de que la chica se hubiera dado cuenta de ese hilo sin atar.- Salvia no te dijo nada para ponerte a prueba; claro, ¿no pensarías que iban a dejarte sin "evaluar", no?
>>Otras de mis misiones es informar de tus pensamientos y tus ideas. Pero no te agobies, no van a juzgarte, simplemente quieren saber qué es lo que sientes en realidad. Y yo soy el nexo de unión entre ellos y tú.
- ¡Aahh! Entonces todo aclarado - parecía que ya se había quedado tranquila.- Pero tengo una pregunta: ¿Heracles puede verte?
- Sí, puede verme, pero te recomiendo que le hables de mí antes de que me vea por primera vez, sé que no suelo gustar a primera vista.
- De acuerdo, entonces... ¿te digo la palabra de llamada? No es una que use con frecuencia, porque si la usara demasiado te haría venir cuando no te necesitara, pero es mi palabra favorita.
- Adelante, la tienes que decir alto y claro y con una pronunciación perfecta.
- Efímero - Águeda vocalizó como en su vida lo había hecho.- ¿Quieres un té?
- Con un poco de limón, por favor - Dim estaba muy contento, esa misión tan importante iba como la seda.

Continuará...

miércoles, 8 de julio de 2009

Paréntesis

Esta semana no habrá un nuevo capítulo de "La extraña aventura de Águeda Ivanova". Me voy de vacaciones y no podré publicar.
Pero para que no os "desenganchéis" de mi blog, se me ha ocurrido algo: ¡¡voy a hacer un concurso!!
Como veréis a la derecha, hay una encuesta y allí podréis responder a una sencilla pregunta:

¿Quién creéis que es la extraña criatura morada?

Sí, ya sé que en las encuentas los votos son anónimos. Pero he encontrado una solución a ese pequeño problemilla. Cuando hayáis votado, hacéis un comentario en esta entrada y me ponéis cual ha sido vuestra elección.

Y bien, aquí viene lo mejor, el premio. El ganador de este "mini-concurso" ganará el ser un personaje secundario de "La extraña aventura de Águeda Ivanova".
En el caso de que haya dos ganadores, ambos aparecerán en la historia y si hay tres ganadores o más, pues se hará un segundo concurso para ver quién es el gran vencedor.

La encuesta estará abierta hasta el día Lunes 13 de Julio a las 20:00h.

Bueno, ahora sólo me queda desearos algo:
¡¡Buena suerte a todos!!

PD: como sé cómo va esto de los concursos y algunos, antes de votar, verán los comentarios de los demás, he decidido activar la moderación de comentarios; ésta será desactivada en cuanto se acabe la encuesta.

domingo, 5 de julio de 2009

La extraña aventura de Águeda Ivanova - Una criatura mágica - Capítulo 7

- ¿Mi padre? - a Águeda la historia ya no le parecía nada divertida.
- Sí hija mía, tu padre ha sido el único ser mágico que ha desaparecido por el uso excesivo de la magia - Salvia volvió a hablar tan serena como siempe.- Siento que la OMCPS no pudiera hacer nada para evitar esa desgracia. Pero por eso estoy aquí, he venido para avisarte de la suerte que puedes correr si sigues utilizando la magia tal y como lo has hecho hasta ahora. Ahora tu destino esta en tu mano y puedes hacer dos cosas: cumplir el Reglamento de la Magia que te dejo aquí o seguir como hasta ahora y poder sufrir una muerte como la que sufrió tu padre.
>> Y me voy ya que llevo aquí más tiempo del esperado. No te preocupes por tu amigo que se despetrificará nada más marcharme. Espero que la próxima vez que nos veamos sea con algún motivo más agradable. Adiós.

Salvia se esfumó al sonido de algo parecido a un chasquido de dedos.

Heracles despertó de aquél letargo inducido y se soprendió cuando vió que fuera estaba empezando a amanecer.
Vió que su amiga estaba en la sala, algo aturdida y pensó que algo grave abría sucedido.

- Pero... ¿qué ha pasado? ¿Qué es lo que me ha hecho lo que fuera que estuviese hablando?
- Te petrificó, dijo que las personas no-mágicas no podían ver a los miembros de la OMCPS - Águeda hablaba mirando fijamente el punto en el que estuvo sentada Salvia toda la noche.- Ven, siéntate que cuando te explique todo lo que me ha contado Salvia te vas a quedar petrificado otra vez.

- ¿Tu padre? ¿Pero tu madre no te dijo que fuiste adoptada? - Heracles no salía de su asombro.
- Por lo visto, mi madre pensó que era mejor no saber nada de mi padre. Tendré que buscar esa carta que envió la organización a mi madre cuando nací, y esperar que allí haya alguna explicación para lo que hizo mi madre.
- Bueno, tú no te preocupes, seguro que tu madre dejó por algún lado alguna explicación - Heracles se había levantado y se estaba poniendo su chaqueta marrón.- Yo te tengo que dejar, tengo una reunión a la que no debo faltar. Volveré en cuanto acabe. Tu mientras descansa, échate en la cama y no pienses. Nos vemos en la tarde.

Águeda estaba tan cansada que no tuvo fuerzas ni de irse a la cama; se recostó en el sofá y durmió largo rato.
Al despertarse, Águeda calentó una infusión de hierbas y subió a la que fue la habitación de invitados. Quería buscar esa carta que de la que había hablado Salvia y, según la elfa, ésta se encontraba en el primer cajón de la cómoda de aquel dormitorio.
Efectivamente, la carta de la OMCPS estaba allí, con las instrucciones que la organización le había mandado a su madre. Junto a ésta se encontraba un sobre cerrado en el que podía leerse "para mi hija". Lo abrió con mucho cuidado y comenzó a leer:

"Querida hija:
Siento que te hayas enterado así de tu verdadera procedencia, pero tienes que pensar que lo único que yo quería era protegerte de ti misma y pensé que si no conocieras tus orígenes no correrías la misma suerte que tuvo tu padre.
Ahora haz caso de tu instinto, de ese instinto que siempre has tenido para lo que debes hacer y busca aquello que tu espíritu te indique.
No me guardes rencor. Sé que encontrarás lo que necesites para ser feliz.
Te quiero.
Mamá."

A Águeda le corrían dos grandes lágrimas por la cara. No sabía que su madre tuviera tanta intuición y le sorprendió que adivinara lo que pasaría después de tantos años de su muerte.
Estaba tan aturdida que no se dió cuenta de que no estaba sola en la habitación.

- ¿Siempre eres tan maleducada? Anda que no saludar siquiera a quien viene a visitarte... Creo que me he confundido al venir aquí.

Una extraña criatura morada le hablaba desde el alféizar de la ventana.

Continuará...

jueves, 2 de julio de 2009

La extraña aventura de Águeda Ivanova - Todo tiene una explicación - Capítulo 6

- ¿Pero tú qué eres? - Águeda estaba tan asombrada que cada palabra que salía de su boca parecía que las pronunciaba su subconsciente.
- Divina inocencia... Tu madre debería haberte informado de todo esto hace muchos años - Salvia parecía algo desengañada con esa mujer.- Le enviamos una carta con todo lo que debía contarte el día de tu nacimiento... ¿no has encontrado esa carta? Es asombroso que encontraras el portal del correo, escondido a conciencia por tu madre, y no ese papelucho que metió en el primer cajón de la cómoda del dormitorio de invitados...

Águeda empezó a pensar que todo aquello era un sueño de los raros... ¿Cómo podía saber esa cosa lo que había en su casa?
- Siéntate hija mía... esto nos llevará tiempo - Salvia entró en la sala de estar y se puso lo más cómoda que pudo.
>>Soy Salvia, la Elfo del Poder y miembro más antigua de la Organizacion Mágica de Control de Poderes Sobrenaturales. Esta organización nació hace muchísimo tiempo para intentar dar soluciones a los problemas que ocasiona la magia en este mundo.
>>La magia, al contrario de lo que la gente se piensa, no es algo que se pueda usar al antojo de uno. Tiene muchos riesgos, el permanente uso de la magia tiene un efecto terrible... tan terrible que ningún mago, antes de la fundación de la OMCPS, podía suponer. Esta organización, pues, pretendía advertir a todas aquellas criaturas mágicas de los efectos negativos del uso de hechizos y embrujos. Pero pocos magos saben qué es eso tan terrible... los fundadores de la OMCPS temían tanto la reacción de los demás que prefirieron dictar el Reglamento de la Magia, que todos debían cumplir. Si no lo cumplían serían castigados con encarcelamientos y cursos de reinserción, en los casos más leves, o con privaciones completas de la magia, en los casos más graves.
>> Así que todas las criaturas mágicas optaron por cumplir el reglamento a pies juntillas sin pedir ninguna explicación; lo único que ellos querían era seguir siendo mágicos, y el miedo a ser castigados a una vida sin magia fue mucho mayor que la curiosidad.

- Pero... ¿qué pinto yo en todo esto? - A Águeda le estaba gustando la historia, pero no terminaba de comprender su papel en ella.
- Hace ya tiempo sucedió lo que todos los miembros de la OMCPS temíamos. Hubo alguien que no quiso cumplir el reglamento, un mago tan poderoso que se creó a sí mismo y que concebía la magia como algo tan natural como el bosque en el que vivía.
>> Pero la OMCPS actuó tarde; le visitamos para recomendarle seguir el Reglamento de la Magia, pero fue tan impactante la noticia que ocurrió aquello que decían los fundadores de la organización; este mago empezó a realizar hechizos como un loco, sin pararse a pensar en sus consecuencias, era presa de una locura transitoria que le causó lo que a nadie le había causado... Sí, yo fui testigo de cómo se hacía presente el efecto negativo del uso de la magia...

- ¿Y qué le paso? ¿Cuál es ese efecto? - Águeda echaba de menos unas ricas palomitas.
- La autodestrucción - Salvia contenía las lágrimas como podía.- La magia en exceso causa autodestrucción.
- ¡Qué triste! ¿Y quién era ese mago tan poderoso?
- Sergey Ivanov - por el rosotro de la pequeña elfo corrían dos lágrimas - tu padre.

Continuará...